Hablar de la Salzadella es hablar de cerezas, incluso de paraíso de las cerezas, dado que este cultivo constituye una auténtica tradición en el pueblo, donde muchas generaciones han trabajado hasta conseguir unas variedades de cerezas de gran sabor y calidad.

Los orígenes de las Cerezas de la Salzadella se remontan a época antigua, más de dos siglos atrás, cuando muchos salzadellenses apostaron por este cultivo como producción agrícola. Ahora, aquel esfuerzo es reconocido por el saber popular y, además, cuentan con el reconocimiento de la «Marca de Calidad CV» de la Comunidad Valenciana.

El singular clima de la Salzadella, mediterráneo de interior, condiciona y favorece el cultivo de las cerezas, producido en pequeñas extensiones y recolectado fruto a fruto. Además, hay que destacar sus extraordinarias calidades nutricionales, pues las cerezas de la Salzadella son una fuente importante de vitaminas, de minerales y de excelentes antioxidantes.

La cereza de la Salzadella llega a su estado óptimo de madurez durante los meses de mayo y junio, época en la que los visitantes pueden adquirir las cerezas en su estado más natural, directamente desde el árbol y sin perder ninguno de sus múltiples propiedades.

Este año, la Feria de la Cereza se celebra el primer fin de semana de junio, los días 31 de mayo y 1 de junio, donde vecinos y visitantes pueden degustar las diferentes variedades de cereza y adquirir
productos derivados de esta como : pasteles, licores, mermeladas, colas de cereza para infusiones, etc. convirtiendo a la Salzadella en el Paraíso de la Cereza.